El origen de los guantes y mascarillas médicas

La crisis sanitaria por el coronavirus ha puesto en valor gestos como el lavado de manos y el uso de guantes y mascarillas médicas para prevenir contagios. A día de hoy, todos salimos a la calle con mascarilla, por eso en este post queremos contarte cuál es el origen de los guantes y mascarillas médicas.

Mascarillas y guantes quirúrgicos, ¿de dónde vienen?

Hoy en día la importancia de estas rutinas diarias en la atención sanitaria es indiscutible. Sin embargo, hay que remontarse a tiempos remotos para conocer su historia y evolución.

En la Edad Media se creía que el baño favorecía la llegada de enfermedades porque ablandaba la piel y abría los poros a todo tipo de males. La peste bubónica o Peste Negra fue descrita como la epidemia más letal de la historia, que se extendió en Europa entre el siglo XIV y principios del siglo XVIII. En aquel tiempo se pensaba que la peste se contagiaba por vía aérea y que penetraba en el cuerpo por los poros de la piel. Por esta razón los médicos diseñaron una aparatosa indumentaria para atender a los pacientes. La vestimenta incluía una máscara diseñada con forma de pico de ave para impedir acercarse al aliento del infectado, y a su vez mitigar el olor con plantas aromáticas en la zona del pico.

En el Museo Alemán de Historia Médica de Ingolstadt se exhibe una auténtica máscara de médico de la peste del siglo XVI que se ha conservado a lo largo de los años.

De la antisepsis a la asepsia

Durante las primeras décadas del siglo XIX las tasas de mortalidad en los hospitales se disparaban debido a las pésimas condiciones en que se realizaban las operaciones. No fue hasta la segunda mitad del siglo XIX cuando las técnicas asépticas y el uso de indumentaria quirúrgica especial adquirieron relevancia. Con ello se consiguió eliminar la presencia de contaminantes causantes de las infecciones durante los procedimientos quirúrgicos.

El médico húngaro Ignaz Semmelweis, conocido como “el salvador de las madres”, descubrió en 1840 cómo el hecho de que los médicos se lavasen las manos en el hospital evitaba la muerte de mujeres parturientas al dar a luz. No contó con el respaldo de la comunidad científica, pero sentó las bases de la antisepsia sanitaria.

Sería el cirujano inglés Joseph Lister quien, con la ayuda de las pioneras revelaciones del químico y bacteriólogo francés Louis Pasteur, transformó la práctica médica.


Lister llegó a la conclusión de que la mayor parte de las infecciones contraídas en las heridas eran de origen bacteriano. Introdujo el concepto de asepsia en la práctica quirúrgica, utilizando las nebulizaciones con fenol para desinfectar el aire, el lavado de manos y la desinfección de la zona quirúrgica.

Además, Lister diseñó varios instrumentos quirúrgicos, realizó una mastectomía a su propia hermana -con cáncer de mama-, y llego a tratar a la reina Victoria de un absceso en la exila.

Guantes de goma, una historia de amor

El uso de guantes quirúrgicos se atribuye en 1890 a William Stewart Halsted, un médico estadounidense considerado como uno de los principales precursores de la cirugía moderna. Su ayudante de quirófano, Caroline Hampton, quedó incapacitada debido a una dermatitis provocada por los antisépticos que utilizaba. Halsted pidió a una conocida empresa fabricante de neumáticos que diseñara unos guantes de goma lo bastante finos como para permitir a la enfermera trabajar en quirófano. Poco después ambos sanitarios se casaban. A finales del siglo XIX el uso de los guantes quirúrgicos ya era obligatorio para médicos, cirujanos y enfermeras. En 1958 aparecieron los guantes de látex.

Por su parte, el cirujano rumano Mikulicz introdujo en 1897 las mascarillas de gasa tras demostrar la teoría de la infección por gotas. Fueron obligatorias en 1926 para evitar que los cirujanos contagiaran a los pacientes al toser o estornudar. A partir de 1950 las normas de seguridad en quirófano han sido más estrictas; en los años 80 comenzó a usarse la ropa desechable.

Estas y otras muchas aportaciones a lo largo de la historia han sido claves para configurar las actuales medidas y protocolos de seguridad en la prevención de infecciones en el ámbito sanitario y desde nuestro centro de medicina estética en Asturias ¡queremos que los conozcas!



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